20 de novembre del 2009

Grandes finales de la historia del cine: El Planeta de los Simios (1968)



Uno de los finales más impactantes y potentes de la historia del cine es el de El Planeta de los Simios (1968). Tras un viaje espacial accidentado, el coronel George Taylor es capturado por una civilización de simios evolucionados que le someten a todo tipo de vejaciones. Contando con la colaboración de dos científicos simios, Taylor consigue huir con su nueva compañera Nova (la atractivísima Linda Harrison). Pero su libertad recién estrenada recibe un fuerte golpe cuando la visión de los restos de la Estatua de la Libertad embarrancados en la orilla de una playa, le permiten ver que el misterioso planeta al que había arribado no era otro que la Tierra, donde varios milenios después de su marcha los humanos eran ahora esclavos a las ordenes de unos simios que se habían convertido en los líderes tras un cataclismo nuclear que había devastado el mundo.

Esta escena final que, a pesar de los años transcurridos sigue teniendo la misma fuerza, fue idea de Rod Serling, autor de la primera versión del guión (adaptando la novela de Pierre Boulle). Serling, creador de la mítica serie The Twilight Zone, creó un libreto que se descartó por exigir un presupuesto muy elevado. Sin embargo, los productores mantuvieron algunos elementos y, por supuesto, la conclusión final. Michael Wilson se encargó de hilvanarlo todo y fue el autor final del guión de rodaje.

Taylor, arrodillado en la arena ante los restos de la Estatua de la Libertad, pronuncia unas palabras ya míticas en la historia del cine:


"Oh my God. I'm back. I'm home. All the time, it was... We finally really did it.
You Maniacs !! You blew it up !!! Ah, damn you !!! God damn you all to hell !!!"


Sin duda, es una escena para la historia.